domingo, 26 de julio de 2009
Stop motion! Se vuelve a mover!
Desde que somos niños los juegos de percepción nos van llamando la atención con atracción casi magnética. Poco a poco, si no estamos atentos, vamos perdiendo la capacidad de asombro ante muchas cosas que antes nos hacían creer casi en la magia y echaban a volar nuestra imaginación a mundos lejanos.
Nuestro primer encuentro con un espejo reflejado en otro espejo multiplicándose de manera infinita, las formas, combinaciones y belleza simétrica de un caleidoscopio, el cómo se proyecta la imagen en la pantalla de cine que te hace inevitable ir a tocarla o a asomarte que hay detrás, o en la misma televisión que de niño no terminas de entender cómo es que se metió toda esa gente en esa cajita!
El Stop motion es uno más de todos estos juegos de percepción que alguna vez nos parecieron mágicos.
Quién no dibujó en las orillas de su cuaderno a un monito que modificándolo página a página y pasándolas rápidamente nos daba el efecto de movimiento. Imposible de olvidar esa experiencia.
Pues afortunadamente el juego de buscar movimiento en lo estático se fue más allá, exploró y maduró al grado de establecerse como técnica en sí misma, consiguiendo así la forma más básica de la animación. El Stop motion, la animación cuadro a cuadro.
Diferente al dibujo animado, el stop motion propone la animación por varios medios: objetos, modelos de plastilina, imágenes o incluso personas tomadas fotograma a fotograma dando la sensación de movimiento.
Recientemente el género ha retomado fuerza y se deja ver más a menudo en videos musicales, en la intro de algunas series o incluso para los más osados, mostrando realidades fantásticas en algún largometraje.
El stop motion nos cautiva por muchos motivos, pero creo que principalmente más allá de reconocer la labor titánica que representa su factura, está esa conexión con el niño que una vez creyó en sensaciones más allá que en sus conceptos, el encanto de olvidar razones y vivir mejor momentos en mundos de ilusión.
Así que a disfrutarlo con una sonrisa!
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Héctor, En "Todas" la veces que suelo entrar a tú BLOG diariamente, no deja de "Cautivarme" cada "PALABRA" que escribes y van dando forma a cada Articulo que CREAS en verdad, No hay cosa que me tome más en serio que las PALABRAS, en todo sentido. Es fácil perderme en esas trampas que yo mismo tiendo pues casi siempre me tomo lo que leo demasiado literal, sin interpretaciones y cuando falta información esta la completo con historias que me acomoden, que me convengan. Es nefasto desde cualquier punto de vista pues el resultado es amargo, me lisia mentalmente por días enteros. Hace algunos meses escuché a un actor, o profesor de actuación, no recuerdo, decir a sus alumnos: “miren a los ojos sin crear historias”, casi como una epifanía esa casual sentencia me ha hecho resumir muchas actitudes fallidas que persisten a pesar de las guías que estoy siguiendo. Desde que recuerdo he tenido la suerte (buena o mala aún no lo sé) de enterarme particularmente de lo que no deseo saber, de lo que me rehúso saber, como consecuencia me enclaustré en una silente observación de vez en cuando rota por el ruido de una exclamación casi siempre de confusión e ignorancia. Creo que ese es el último punto a resolver.
ResponderEliminarSin embargo al ir limpiando de polvo las falsa percepciones me doy cuenta de otras cosas que no son del todo agradables y se presentan nuevas perspectivas a considerar, definir alcances, plazos; tales cosas implican cierta responsabilidad que no es fácil asumir, causando la tentación de volver a guardar silencio, observar y restarle el valor a todo; pero no quiero eso, lo que quiero es simple, tan posible, tan común pero que a veces se vislumbra tan inalcanzable; no obstante sigo convencido sobre el sentido de todo esto.
¿Será posible vivir sin obsesiones? No puedo imaginarme seguir abriendo puertas con la muñeca o con la punta de los dedos y no con la mano, no amarrarme las agujetas por un extraña imagen que adquirí hace tiempo, dejar esos objetos en la misma posición en que fueron dejados(como esa silla que sigue en el mismo lugar), ,dejar la tele prendida sin verla…
Pienso y creo que las letras son intenciones, lo mejor y peor que he vivido ha sido a través de ellas, sólo resta que algunas de ellas tenga por respuesta algo que no sea silencio o distancia.
Y nuevamente te digo "Gracias ante estas ganas de saber"
que mas puedo decir que usted no haya dicho ya sobre el stopmotion??
ResponderEliminarefectivamente, es una de esos juegos de percepcion que tanto nos asombraban desde pequeños, pero... el stopmotion logra lo que ya no pueden hacer esos juegos!!!
cada vez que veo uno de estos videos, no dejo de asombrarme por la capacidad de planeacion y dedicacion de sus autores, pero, como usted dice:
lo que mas me impresiona es la profundidad que transmite la tecnica.
simple, limpia... solo se requiere de la capacidad de percepción (precisamente lo que se busca transmitir)y mas importante aun: la paciencia.
me pregunto si a un niño le asombrara el stop motion mas de lo que a nosotros nos asombra...
p.d. deje un comentario en su primer post.
HËCTOR.....
ResponderEliminarPaso a paso, vas desarrollando iniciativas y actividades que van dejando un cambio de mentalidad en la gente que te rodea, es así con el trabajo del día a día como se consigue cambiar la cultura de convivencia y respeto entre todos, me han emocionado leer tus artículos NUEVAMENTE y ver los cortes de vídeos.
Las personas que como tú se implican y incitan a cambiar las cosas trabajando son los verdaderos artífices de los cambios que han de venir.
saludos Agustín Vallejo
Meditar
ResponderEliminarMientras me lavo los dientes; en lo que tarda en encender la computadora; cuando alguien escribe en un pizarrón; durante las primeras burbujas que suelta el agua antes de hervir; cuando alguien inicia una conversación con la frase ¿qué has hecho?; si estoy esperando que Chipé y Poi terminen su comida, también... siempre se me va la mente.
Pero sabes "Hay una constante en mi mente", Tú...